Cómo ayudar a tu gato a aliviar el calor en verano

Cuando las temperaturas suben, nuestros gatos también lo sienten. Aunque sean animales resistentes, el calor puede afectar su bienestar, su comportamiento e incluso su salud. Si notas que tu gato busca rincones frescos, se estira más de lo normal o bebe más agua, es porque está intentando regular su temperatura corporal. Como cuidadores responsables, es importante saber cómo ayudarles a pasar el verano de la forma más cómoda posible.

¿Cómo saber si tu gato tiene calor?

Los gatos no sudan como nosotros. Para regular su temperatura, jadean, se lamen más de lo habitual o buscan suelos fríos donde acostarse. Algunos signos de calor excesivo pueden ser:

• Jadeo leve o constante
• Lengua fuera o respiración acelerada
• Letargo o falta de apetito
• Búsqueda de sombras o superficies frías
• Hidratación excesiva o necesidad constante de agua

Consejos prácticos para refrescar a tu gato

1. Agua fresca siempre disponible

Asegúrate de que tu gato tenga acceso a agua limpia y fresca en varios puntos de la casa. Puedes añadir cubitos de hielo al bebedero o usar fuentes automáticas, que los animan a beber más.

2. Espacios ventilados y con sombra

Deja cortinas corridas o persianas semi cerradas durante las horas de más calor. Si usas ventilador, asegúrate de que no esté directamente sobre tu gato. Evita dejarlo en habitaciones cerradas sin ventilación.

3. Cama de verano o alfombrilla refrescante

Hay camas refrigerantes especiales o puedes dejar una toalla húmeda sobre el suelo. Evita mantas gruesas o lugares mullidos donde se acumule calor.

4. Cepillado frecuente

Ayuda a eliminar el pelo muerto y mejora la ventilación de su piel. Esto es especialmente importante si tu gato tiene el pelo largo.

5. Snacks helados o juguetes fríos

Congela una pequeña porción de comida húmeda en forma de cubito o usa juguetes que puedan enfriarse. Es una forma divertida y segura de refrescarse.

¡Cuidado con los golpes de calor!

Un golpe de calor es una emergencia veterinaria. Si ves a tu gato extremadamente decaído, con las encías rojas, tambaleante o jadeando en exceso, acude al veterinario de inmediato. Nunca dejes a tu gato en un coche cerrado o bajo el sol directo.

Conclusión

El verano puede ser una época divertida y tranquila para tu gato si tomas algunas precauciones básicas. Observa sus señales, adapta su entorno y dale todo el cariño (y agua fresca) que necesita.

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